Queridos lectores hoy les quiero contar de un lugar muy especial para mi y toda mi familia.
Desde muy pequeño recuerdo que cuando llegaba la semana santa, era motivo de viaje a la Laguna de Apoyo. Mi mamá tiene unas amigas donde nos quedamos desde el lunes santo hasta el domingo. Ahí aprendí a nadar, a despertar con el sonido suave de las olas, a cortar jocotes, beber tamarindo, etc.
Hoy la situación es diferente mi mamá se esta recuperando y las condiciones no son las adecuadas para ella. Así que la tristeza por no ir se sentía en el ambiente.
Ayer sábado me sorprendió una llamada de mi hermana para ver si podía ir con mi familia a pasar una tarde a la laguna con mi mamá. No la pensé dos veces porque uno nunca sabe si esta sera la ultima.
La platica con las amigas de mi mamá no tiene precio, les mencione que cuando ella habla de mi papá siempre lo ve sentado en su camioneta, con sus anteojos para el sol y esa mirada de artista de cine.
Ellas sonrieron y dijeron que no recuerdan haberlo visto así, solo lo recuerdan sentado en las piernas de ella cuando eran novios, eso hace más de 45 años.
Mi mamá sonrió discretamente, creo que eso la delato ¿No creen?
woow es sorprendente verdad como nos trae recuerdos siertos lugares, pero a ti de seguro te gustaba la parte de la comida pero mas la de estar en familia, y esa descripcion salvaje de tu papa es la misma de vos ahora verdad, chao que bueno que vivis la vida con ritmo y nivel, chao.
ResponderBorraratt Frank Collado beca 00159